El niño Ricardito del Presbítero Maestro
El Cementerio Presbítero Maestro es uno de los lugares más famosos de la ciudad para estar en contacto con el mundo paranormal, especialmente con almas que habitan el sitio y tienen cierta influencia sobre los que seguimos vivos.
Entre ilustres personajes ahí enterrados, tenemos a un niño muy particular que ha sabido ganarse el cariño de la población y es debido a que muchos aseguran que es sumamente milagroso. En la visita que hizo Lima Paranormal descubrimos quién es este personaje y cuál es su historia.
Antecedentes
Su nombre completo era Ricardo Espiell Barrionuevo que vivió hasta el primero de marzo de 1893 cuando apenas tenía diez años. No se conoce mucho de su familia, salvo que sus padre fue enterrado en 1887 cuya lápida está a su costado.
Las leyendas urbanas tienen varias versiones de cómo empezaron, en Lima Paranormal te contamos la versión oficial del cementerio, la cual es la más similar a la que se ha contado generación tras generación y ha ayudado a alimentar la creencia popular de que este niño es milagroso. Es por ello que todos los días, el niño es adornado y vestido con regalos, fotos y placas en su nombre, nunca le faltan flores y es más, en el día de su cumpleaños se hace un festejo a lo grande.
Se dice que una mujer llamada Benedictina, por la década de 1940, tenía a su hijo muy enfermo en el hospital de un mal extraño. La mujer, que había ido a visitar a sus abuelos al cementerio y pedir por la salud de su niño se topó con la estatua del niño Ricardito, era tal casualidad que su hijo se llamaba del mismo modo que decidió contarle a la estatua qué le sucedía a su pequeño. Cabe resaltar que para la época, las personas eran muy respetuosas con los muertos y creían en que las almas buenas podían ayudarte si te comportabas de buena fe con ellas.
Doña Benedictina, al terminar de contarle la historia le pidió al niño de la estatua que ayude a su joven hijo. En un par de semanas, su hijo recobró la salud y la mujer, en un acto de agradecimiento, regresó y le prometió que siempre le llevaría flores hasta el día de su muerte.
Los milagros
Como su visita al cementerio era reiterada, otra mujer vio a doña Benedictina, la cual le contó el milagro que le había hecho Ricardito. Ella a su vez le pidió por la salud de su esposo y le cumplió la petición. Es así que la popularidad del niño ha aumentado al pasar las décadas y se dice que es especialmente milagros en los favores de: salud de niños y cachueleos.
No hay quien confirme la santidad de este pequeño, sin embargo, su inesperada muerte logró conmover a tantos que es recordado hasta ahora. Puedes descubrir más acerca de este niño en el blog especializado en su historia. ¿Lo has visitado?
Foto exclusiva de Lima Paranormal
Ademas, te invitamos a que leas nuestro artículo del Pabellón de los Suicidas que también se encuentra en el Presbítero Maestro.
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